Inteligencia Emocional y Techos Mentales

Frida Sandoval • 2 de mayo de 2025

Inteligencia Emocional y Techos Mentales


En este episodio de Las 3 R’s Podcast, Nathaly Marcus conversa con Margarita Pasos, conferencista y mentora, sobre inteligencia emocional, el manejo del estrés y las creencias que limitan nuestro desarrollo personal. Se exploran temas como la “dieta mental”, el impacto del diálogo interno y cómo identificar y superar techos mentales, especialmente en mujeres que atraviesan procesos de cambio entre los 35 y los 70 años. El episodio ofrece herramientas concretas para cuestionar creencias, regular emociones y tomar decisiones más conscientes en la vida diaria.


¿Qué es una dieta mental?


Así como una buena alimentación mejora la salud física, cuidar lo que consumimos a nivel emocional y mental influye directamente en nuestro bienestar. Margarita propone hacer una “dieta mental”: dejar de lado contenidos negativos o tóxicos y enfocarse en aquello que aporta claridad, inspiración y equilibrio.


El estrés: aliado y enemigo


El estrés puede ser una respuesta natural de protección, pero cuando se vuelve crónico, deteriora la salud emocional y física. Identificar los detonantes y aprender a regular las emociones ayuda a mantener un sistema nervioso más balanceado y una mente más clara.


El poder del diálogo interno


Muchas veces, lo que nos detiene no es el entorno, sino la voz con la que nos hablamos. Margarita llama a esa voz repetitiva y crítica “la loca de la casa”. Aprender a identificarla, cuestionarla y transformarla es clave para cambiar patrones mentales y ganar confianza.

Rompiendo techos mentales

Los techos mentales son creencias limitantes como “no soy capaz” o “ya es muy tarde para mí”. Estas ideas, aunque parezcan reales, muchas veces solo existen en nuestra mente. Superarlas implica reconocerlas, desafiarlas y sustituirlas por nuevas creencias que nos impulsen.


Claves para aplicar en la vida diaria


  • Elige cuidadosamente lo que consumes a nivel emocional y mental.
  • Respira antes de reaccionar: las decisiones impulsivas rara vez son las mejores.
  • Cambia tu narrativa interna: lo que te dices impacta en lo que haces.
  • Ponle nombre a los pensamientos negativos y bájales el volumen.
  • Establece metas claras que te mantengan enfocada y motivada.

La inteligencia emocional no solo mejora nuestras relaciones, también impacta directamente en nuestra salud y calidad de vida. Romper con los techos mentales y entrenar la mente es posible a cualquier edad. Este episodio es una invitación a comenzar ese proceso con conciencia, valentía y herramientas prácticas.


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🧠 Contribuye al equilibrio emocional y mental

Incorporar Calm Down en tu rutina diaria puede ser un paso adicional para mantener una mente serena y enfocada en tu crecimiento personal.​


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Te subestiman, te lastiman… y los ganas Hay experiencias que parten tu vida en dos. No porque sean glamorosas, sino porque te obligan a preguntarte: “¿De qué estoy hecha realmente?” Eso le pasó a Ceci Flores, actriz, conductora y directora, cuando decidió dejar la universidad por un semestre, apagar el celular, despedirse de su familia y entrar a un reality extremo: Reto 4 Elementos, Naturaleza Extrema. Diez semanas en la selva. Sin reloj. Con poco sueño, poca comida… y muchos bichos. Empujar barriles que pesan el doble que tú, colgarte casi 40 minutos de un poste, comer cucarachas y licuados imposibles mientras la cámara te apunta… y aun así no rendirte. No por un premio, sino por algo más profundo: demostrarte que no te subestimaste. Esta es la historia de una mujer que descubrió que su fuerza real no estaba en sus músculos, sino en su mente. Y que hoy nos viene a recordar algo incómodo, pero liberador: el límite casi nunca está afuera… está en tu cabeza. Cuando el problema es creer que “no puedes” Tal vez tú no estás en una selva comiendo larvas, pero sí viviendo tu propio “reality” diario: Te da miedo intentar algo nuevo porque “¿y si fallo?” Te aterra salir de tu rutina, aunque ya no te haga bien. Crees que el cansancio, el estrés o la falta de energía “así son” y punto. Te comparas con los “más fuertes”, “más grandes”, “más preparados” y decides que tú no. Nos pasa a todos: confundimos comodidad con seguridad y evitamos cualquier reto que nos saque de la zona conocida. Ceci también era así en algo muy puntual: no soportaba ni ver un bichito cerca. Y terminó con una tarántula caminando por su cuerpo… y sin entrar en pánico. No porque de repente “dejara de tener miedo”, sino porque entendió que puedes seguir adelante incluso con miedo. Y ahí cambió todo. La mente más fuerte que el cuerpo Cuando Ceci recibió la llamada para entrar al reality, estaba a media carrera de cine. Tenía una regla familiar muy clara: primero la escuela. Y aun así, su papá le dijo algo que le cambió la jugada: “Estás estudiando para tener una gran vida profesional. Si esta oportunidad puede ayudarte en eso… tómala.” Con esa bendición, Ceci se fue 10 semanas a la selva. Ahí se encontró con tres grandes maestros: El cuerpo que aguanta más de lo que creías Antes del reality, Ceci entrenaba como “flaca cuidadosa”: poco peso, miedo a lastimarse, mucho límite mental. En el juego se topó con: Empujar barriles gigantes pesando apenas 44 kilos. Cargar, jalar, trepar y aguantar tiempos que jamás había imaginado. Competir lesionada: nervio del bíceps lastimado, dedos esguinzados, rodilla golpeada. Y aun así seguía. No porque el dolor desapareciera, sino porque descubrió que la cabeza decide antes que el músculo cuándo te rindes. El hambre, el sueño y la incomodidad como entrenamiento mental Nada de buffets, nada de “healthy brunch”: Días enteros a base de huevo, arroz, un poco de pollo y crudités ralladas. Horarios rotos: grabar a medianoche, dormir en el piso, levantarse sin saber qué hora era. Aprender a disfrutar cuatro horas de sueño como si fueran ocho. El cuerpo se adapta. La mente se queja primero… o se vuelve cómplice. El equipo como gasolina emocional Había pruebas en las que el cuerpo ya no daba, las lesiones pesaban y la nostalgia por la familia pegaba fuerte. Ahí aparecía su equipo: Compartir la comida con quienes estaban peor. Cuidarse entre todos cuando alguien se lesionaba. Recordarse mutuamente que nadie gana solo, aunque la final sea individual. En la pista final, Ceci no era la más grande ni la más “imponente”. Pero sí era la que mejor conocía cada obstáculo, cada truco, cada detalle del circuito. Mientras otros llegaban con fuerza bruta, ella llegaba con estrategia, experiencia y enfoque. Y eso hizo toda la diferencia. Ejemplos reales de una mente que decide no rendirse Hay escenas del reality que Ceci nunca va a olvidar… y que tú tampoco cuando las escuchas: Comer cucarachas… y seguir adelante En los retos de “inframundo”, Ceci llegó a comerse 36 cucarachas a lo largo del programa, además de licuados con órganos y mezclas que daban náusea solo de olerlas. Terminaba la prueba, salía a vomitar, tomaba agua, volvía a vomitar… y luego regresaba a competir. No se trataba de “aguantar por aguantar”, sino de decirse: “Si ya pasé por esto, no me voy a ir a la primera.” Dormir poco, sin reloj y sin quejarse (tanto) Los días podían terminar a las 3 de la mañana y volver a empezar a las 6. Sin idea de la hora, sin cama, sin baño cómodo. El cuerpo se confunde, la mente también. Ceci eligió una estrategia: estar presente en el juego .  No pensar en lo que pasaba afuera, no instalarse en la queja, no vivir en el “cuando salga de aquí”. Un día a la vez, una pista a la vez, un reto a la vez.
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Nos da miedo descansar Con Carla Cardona — actriz, psicóloga y creadora de contenido emocional 🌿 Cuando la vida te obliga a detenerte A veces la vida te frena sin avisar. No porque quieras, sino porque ya no puedes más. El cuerpo grita lo que el alma calla y de pronto te das cuenta de que el ritmo que llevas no es sostenible. Eso le pasó a Carla Cardona, quien después de una exitosa carrera en televisión y cine, entendió que parar no es rendirse, es sanar. Dejó los reflectores y eligió mirar hacia adentro, graduándose como psicóloga para acompañar a otros en su propio proceso de crecimiento emocional. 🪞 Vivimos para producir… pero no para sentir En un mundo que aplaude al que más trabaja, al que nunca se detiene, al que logra más, el descanso se percibe como debilidad. Pero ¿qué pasa cuando ese ritmo te quiebra por dentro? Carla lo explica con claridad: “Nos da miedo parar porque lo asociamos con flojera o mediocridad. Pero detenernos es un acto de amor propio.” Detenerte no es fallar: es darte permiso de escuchar lo que duele, de respirar, de escribir cuando todo parece confuso. Es aceptar que no puedes con todo y que cuidarte también es parte del éxito. 💫 El silencio también sana Para Carla, el autocuidado comienza cuando aprendes a detenerte. El silencio no es vacío: es espacio para escucharte. “ Un cerebro sin descanso ni nutrición no puede sostener pensamientos claros” , comparte. Dormir, hidratarte, nutrirte y moverte con conciencia son prácticas tan terapéuticas como una sesión de terapia.Porque el cuerpo y la mente no son dos mundos separados: son el mismo lenguaje expresado en diferentes formas. 💔 Las crisis son maestras disfrazadas En su podcast Querida Valeria, Carla Cardona ha conversado con especialistas que le cambiaron la mirada. Uno de los episodios más impactantes fue con el terapeuta Mario Guerra, titulado “No elijas a tu pareja desde tus heridas.” A través de esa charla comprendió que muchas veces elegimos desde el miedo: el miedo al abandono, al rechazo, a no ser suficientes. Y aunque las crisis duelen, también enseñan. “Las crisis emocionales no se eligen, pero siempre traen un regalo”, dice Carla. El problema es que queremos abrir ese regalo antes de tiempo. Queremos sanar sin sentir, pero el dolor necesita su propio ritmo.
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